VINI, VIDI VINCI

Aunque pueda parecer presuntuoso esa es la sensación un día después de volver de Behobia. No solo por mi, me siento de alguna manera participe del GRAN tercer puesto de Alex, y en menor medida del 8º de Edu, y el vigésimo de Guillermo..., porque como dice la canción "Todos somos de León...".
 En lo personal, me lo pase BOMBA, desde que montamos en el bus el sábado a las 10, se respiraba un ambiente de camaradería, de equipo, y asi fue.
Llegamos a SS, al Kursal, a por los dorsales, pedazo organización, ni colas ni nada parecido, una gran feria del corredor, y a conocer la ciudad. Por cierto muy limpia y muy bonita, los bares un gran defecto, no hay tapas, pero la cerveza, bien. A las 20:00 al Autobús y a Zarauz, al hotel del mismo nombre, maletas a la habitación, ducha, y a buscar la cena, coincidimos en el restaurante, sin planearlo , con el Clan Vaquera y las runeras de la Bañeza, ¡como saben elegir¡. Cenamos de maravilla, una vuelta, una copita y a la cama.
El domingo madrugón, buen desayuno y a las 8:30 para Behobia, las "chicas" se quedaron en la cama, para que iban a madrugar. Cuando llegamos aún no había mucha gente, pronto nos encontramos con los de Leóncorre, Guillermo, Edu, y compañía, muchos ánimos para todos, a reconocer la zona y esperar la hora de la salida.
La mochila en los camiones guardarropa había que dejarla 1 h. antes, menos mal que hacía un día espléndido. Poco a poco la invasión de corredores se iba haciendo notar, ¡que gracia me hizo ver a cientos o miles de corredores dando vueltas a un campo de fútbol¡ todos en la misma dirección.
Se va acercando la hora y la tensión se masca en el ambiente, sin embargo no se muy bien porque estaba muy tranquilo y relajado, quizá porque siempre pensé en disfrutar y no sufrir demasiado. Como dijo Haruki Murakami, sus prioridades en una carrea son: terminar, no andar y disfrutar. Por ese orden me lo planteé  antes de empezar, luego la carrera... CONTINUARÁ
SALUD
NOS VEMOS CORRIENDO